Uno de los movimientos musicales de mi preferencia ( y de los que tuve varios discos de vinilo alguna vez ) ha sido el Yé Yé.
Existen varias versiones de cómo este género musical nació ( no sé si aplica el término "género musical" pero pongamos que sí ) y el cual tuvo un gigantesco suceso en parte de Europa entre 1960 y 1968. Sobre España no sé, pero sí sé sobre Alemania Occidental, Italia, Francia ( donde se originó ) Bélgica y Austria. El Yé Yé, incluso, llegó hasta Japón, donde generó a su vez el enorme suceso del género musical Shibuya-Kei.Una de las versiones dice que el Yé Yé nace a raíz de un productor musical y caza talentos Serge Gainsbourg admirador de The Beatles y su Yea Yea ( de allí el nombre ); otros afirman que es la derivación natural de nouvelle chanson francés; otros apuntan hacia el programa de radio francés Salut et Complains, que salió al aire por primera vez en 1959. En mi opinión es una mezcla de las tres.
Por regla general se describía a las cantantes femeninas de Yé Yé como ascéticas, naives, bonitas, sin talento. Esa descripción en la mayoría de los casos no se condecía en parte con la realidad: estas jóvenes mujeres muy bellas lograron maravillosas carreras artísticas pasado el fenómeno Yé Yé, fueron pródigas y prestigiosas en composición, interpretación, actuación y producción. Y tenían y tienen bastante materia gris.
Entre las cantantes icónicas de este movimiento se pueden encontrar a Sylvie Vartan, Zouzou, France Gall, Sheila y por supuesto: la inmensa e inimitable Françoise Hardy.
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